Ya no habrá nunca más en tu cabeza pensamientos de derrota, ni en tu boca profecías de desánimo.

Ya no habrá nunca más sentimientos de miedo, ni conductas apagadas y adormecidas.

Ya no te acompañarán sombras, sino luz.

Porque la luz gira y sobre abunda a tu alrededor.

Porque la alegría de vivir y la gratitud se anidan en tu corazón.

Porque miras al cielo y a tu alrededor y ves a Dios.

No, ya no eres un bulto inerte, manejado desde las energías de cualquiera.

Hoy eres un poderoso ser a voluntad propia.

Hoy eres paz, salud, amor y prosperidad, porque eso generas y eso mereces.

Perteneces a un bando, estás a un solo lado, como fuerte guerrero, dispuesto a dar la batalla, vigilante y atento.

Hoy perteneces a los que miran sin ver, a los que obtienen sin tener.

Porque sabes que, antes del tener esta el ser.

Hoy eres luz y poder.

Bendecido eres.

Psic. Mayra Sáinz